Las
zonas de manipulación, almacenamiento y uso del hidrógeno deben estar
protegidas frente a rayos mediante el sistema formado por pararrayos,
cable aéreo y picas de tierra. Todos los equipamientos de los edificios
deben estar interconectados y puestos a tierra para evitar chispas
inducidas entre los equipos durante el impacto de los rayos. El diseño
de la protección frente a rayos debe estar realizado de acuerdo con las
especificaciones contenidas en NFPA (1995) y API (2003).
En
los sistemas con purgadores mediante tubos estáticos, donde la ignición
del hidrógeno gaseoso expulsado es un riesgo a considerar, se debe
soldar al extremo del aliviadero una varilla que se extienda por encima
del punto de descarga del gas de tal manera que en condiciones normales
de descarga la concentración del hidrógeno gaseoso en la extremo de la
varilla este siempre por debajo del límite de inflamabilidad inferior.
La
energía necesaria para la ignición de mezclas gaseosas aire/hidrógeno
es tan pequeña que incluso las herramientas a “prueba de chispas”
pueden causar igniciones. Todas las herramientas deben emplearse con
precaución para evitar deslizamientos, golpes, caídas o cualquier
operación que pudiera generar chispas. Se recomienda emplear
herramientas a prueba de chispas y, en el caso de que no sea posible su
utilización, se procurará una atención extra a todas las operaciones.
También es recomendable usar suelos conductores y suelos
“antichispas” para las zonas donde el gas de hidrógeno pueda
acumularse. Estos suelos no deben deteriorarse ya que pierden sus
propiedades conductoras. Por eso deben evitarse las ralladuras, las
pinturas no conductoras o la acumulación
de suciedad.
Los
dispositivos capaces de producir una llama estarán prohibidos dentro de
la zona de exclusión que rodea a toda instalación de hidrógeno.
No
deben realizarse en presencia de hidrógeno trabajos que puedan generar
calor, o producir llamas o chispas como sucede con el corte y la
soldadura.
Los sistemas de combustión interna así como los motores de los vehículos
o las máquinas que utilizan motores de combustión interna deben estar
equipados con detenedores de chispas (“spark arrestors”) en los
sistemas de escape y carburación cuando se empleen dentro zonas donde
el hidrógeno pueda estar presente (zonas de exclusión).
Sólo
se deben instalar sistemas antirretorno (“arrestors”) especialmente
diseñados para aplicaciones de hidrógeno.
Los
sistemas cortallamas concebidos para llamas de hidrocarburos no son
capaces de detener las llamas del hidrógeno.
Los
sistemas antirretorno efectivos contra las llamas aire/hidrógeno pueden
no detener llamas de hidrógeno/oxígeno.
Los
sistemas antirretorno de bronce sinterizado son efectivos para detener
llamas de hidrógeno sin embargo el acero inoxidable sinterizado no es
tan efectivo como el bronce sinterizado.
Los
sistemas antirretorno deben tener un correcto funcionamiento para
minimizar los accidentes por igniciones accidentales.
Para
limitar la aparición de carga electrostática, la acumulación y la
generación de chispas causadas por el movimiento rápido de partículas
en las tuberías o depósitos durante el trasiego los operarios deberían
tomar las siguientes medidas.
Conectar
a tierra e interconectar todas las partes metálicas de la plataforma y
de la estructura que la
contiene.
Usar
correas conductoras en la maquinaria que lo precise.
Conectar
a tierra eléctricamente los equipos antes de tocar o usar una
herramienta en los depósitos dewar o válvulas.
Vestir
ropas resistentes a la electricidad estática como Nomex 3A, normalmente
utilizado en la industria química.
Unir
eléctricamente y poner a tierra las tuberías y los componentes de cada
sistema
.
Emplear
tuberías y depósitos de plástico y composites que tengan una
resistividad superficial de 105 a 1012 Ω/m2
Emplear
revestimientos conductores si es necesario.
Utilizar
aislamientos eléctrico y conectar eléctricamente los equipos entre si
para prevenir la aparición de arcos eléctricos.
Emplear
filtros para limitar la presencia de partículas en las tuberías ya que
pueden aumentar la peligrosidad (API 2003, NFPA 77)
Los
equipos móviles de suministro de hidrógeno deben estar conectados a
tierra e interconectados eléctricamente al sistema antes de descargar
el hidrógeno (NFPA 50A 1994 y 29 CFR 1910.103 1996).
NFPA
70 (1993) define los términos “bonded” (unidos eléctricamente) y
“agrounded” (puestos a tierra) y detalla los tamaños de los
conductores de puesta a tierra y las conexiones adecuadas en función
del amperaje a tierra.
Todas
las instalaciones de descarga deben disponer de puesta a tierra situada
fuera de la zona de transferencia. Las conexiones de la puesta a tierra
deben tener una menor resistencia menor de 10 Ω. Antes de que se
ponga en funcionamiento el subsistema de transferencia todos sus
componentes deben estar puestos a tierra.
El
cableado eléctrico y las máquinas situadas a menos de 0.9 m de un
punto en el que se realizan frecuentes conexiones y desconexiones debe
cumplir los requisitos para las zonas NFPA 70 (1993) para Clase I, Group
B, División 1.
Los
depósitos, fijos y móviles, que contienen hidrógeno líquido y las
tuberías conectadas a él deben están unidas eléctricamente y puestas
a tierra (NFPA 50B 1994 y 29 CFR 1910.103 1996).
|